Después de un periodo de cuarentena de más de cien días como medida frente a la propagación de la pandemia de COVID-19, y luego del desarrollo de un plan de reactivación económica importante (Reactiva Perú) equivalente al 8 % del Producto Bruto Interno (PBI), se proyecta para el segundo semestre de 2020 una progresiva recuperación de la actividad económica en el Perú.

Instituciones como el Banco Mundial y el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) estimaron una caída del PBI real de 12 % y 12.5 %, respectivamente, para el 2020 en el Perú, siendo la manufactura (-23.8 %), la construcción (-25.4 %) y el comercio (-23.6 %) los sectores del PBI no primario más afectados en comparación con los del PBI primario (BCRP, 2020).

Según un informe de la ONG británica Oxfam (2020), una mayor cantidad de personas podría morir de hambre debido al crecimiento de la pobreza por consecuencia indirecta de la pandemia, que por efectos directos de COVID-19. En el país, 2.4 millones de peruanos podrían caer en pobreza este año, lo cual pasaría de 20.2 % a 27.4 % de la población, de acuerdo con información del BCRP (2020).

Si bien para 2021 el BCRP estima una recuperación importante de la economía peruana con un crecimiento estimado de 11.5 %, no será suficiente para recuperar los niveles de producción previos a esta crisis.

El proceso de reapertura de la economía es altamente esperado por las empresas que han estado paralizadas y por la población que ha estado confinada durante este periodo de cuarentena. Sin embargo, es importante tomar en cuenta algunos factores vinculados al riesgo potencial de inestabilidad sino se siguen estrictamente protocolos de control sanitario. Además, no todos los sectores económicos tienen las mismas facilidades e infraestructura para aplicar correctamente estos protocolos o para llevar a cabo el trabajo remoto en buenas condiciones y a nivel nacional.

Por otro lado, varios países, después de haber logrado aplanar la curva epidemiológica, actualmente encuentran una situación de rebote de la pandemia de COVID-19. En consecuencia, algunos de ellos han tenido que retomar medidas de confinamiento y aislamiento, como en Australia o China, por lo menos de forma más localizada. El sistema de salud de Perú no estaría preparado para enfrentar una segunda ola de pandemia.

La difusión al público de una potencial vacuna es por el momento una gran desconocida en esta ecuación. Si bien existen varios laboratorios en esta carrera, hasta el momento, ninguno ha anunciado una fecha oficial de salida o un precio de venta.

Finalmente, las declaraciones del presidente de la República anunciando elecciones generales para el próximo año a fin de reducir la presión de sus detractores políticos, sin duda tendrán también repercusiones económicas. Casi siempre, un periodo electoral es analizado como tiempo de incertidumbre a nivel económico.

Fuentes de investigación

Escrito por:

Benoit Mougenot

Director de las carreras de Economía, Economía y Finanzas, Economía y Negocios Internacionales en USIL. Coordinador del grupo de Investigación en Economía Minera del CIEPSS. Investigador RENACYT-Concytec nivel III.