Louis Pasteur nació en 1822 en la pequeña ciudad de Dole, situada en el este de Francia. A la edad de 25 años se doctoró en ciencias, sus descubrimientos lo convirtieron en “uno de los científicos más grandes del mundo”, como lo llama The World Book Encyclopedia. Pero, ¿Qué beneficios obtenemos de algunos de sus hallazgos? Pasteur realizó muchos descubrimientos, libró su última y más conocida batalla: contra la rabia, Aunque no era consciente de ello, al enfrentarse a la rabia Pasteur penetraba en un mundo muy distinto al de las bacterias: el de los virus, que no era visible con el microscopio (1).

El 6 de julio de 1885, una mujer se presentó en el laboratorio de Pasteur con su hijo de nueve años, a quien acababa de morder un perro rabioso. Pese a las súplicas de la madre, Pasteur se mostró reticente a ayudar al niño. Como no era médico, se arriesgaba a que lo acusaran de practicar ilegalmente la medicina. Además, todavía no había probado sus métodos con seres humanos. Pero finalmente pidió a su colaborador, el doctor Grancher, que vacunara al niño. Así lo hizo, y con buenos resultados. De las 350 personas tratadas en menos de un año, solo una —llevada demasiado tarde— murió (2).

La rabia causa encefalitis viral que mata hasta 70.000 personas por año en todo el mundo. La vacuna contra la rabia de Pasteur ha llevado a una profilaxis tan intensa en los países desarrollados, que, en los Estados Unidos, por ejemplo, solo ha habido alrededor de dos muertes por rabia por año durante las últimas dos décadas; los países menos desarrollados no tienen tanta suerte (3).

Afortunadamente, las vacunas contra la rabia se han convertido en la herramienta más eficaz para prevenir la infección por esta zoonosis viral mortal. Las vacunas actuales son más eficaces si se administran de manera oportuna después de la exposición a la rabia. (4).

Este científico excepcional, observador, hábil experimentador y filósofo imaginativo murió en 1895, después de abrir una nueva era en la medicina y la biología (5). Hoy aún nos beneficiamos de su valiosa labor. Por eso se le ha llamado “benefactor de la humanidad”. Su nombre todavía se relaciona con las vacunas. El Instituto Pasteur, fundado en París en vida del científico para el tratamiento de la rabia, es en la actualidad un renombrado centro dedicado al estudio de las enfermedades infecciosas (2).

Fuentes de investigación
 

  1. Brogren C. H. (2023). Louis Pasteur-The life of a controversial scientist with a prepared mind, driven by curiosity, motivation, and competition. APMIS : acta pathologica, microbiologica, et immunologica Scandinavica, 10.1111/apm.13325. Advance online publication. https://doi.org/10.1111/apm.13325
  2. Watchtower Bible and Tract Society of New York. Louis Pasteur. Los frutos de su investigación. Francia: 1996. Agosto 12. Pag. 24.
  3. Koury, R., & Warrington, S. J. (2022). Rabies. In StatPearls. StatPearls Publishing.
  4. Natesan, K., Isloor, S., Vinayagamurthy, B., Ramakrishnaiah, S., Doddamane, R., & Fooks, A. R. (2023). Developments in Rabies Vaccines: The Path Traversed from Pasteur to the Modern Era of Immunization. Vaccines, 11(4), 756. https://doi.org/10.3390/vaccines11040756
  5. Berche P. (2012). Louis Pasteur, from crystals of life to vaccination. Clinical microbiology and infection : the official publication of the European Society of Clinical Microbiology and Infectious Diseases, 18 Suppl 5, 1–6. https://doi.org/10.1111/j.1469-0691.2012.03945.x