Las mejores universidades del mundo ya no solo se preocupan por contar con programas educativos de excelencia. Hoy, sus esfuerzos se centran también en reducir su huella de carbono.

La Universidad San Ignacio de Loyola (USIL) también obtuvo el año pasado la certificación LEED en la categoría plata, con su nuevo edificio de aulas en el campus de La Molina. Este cuenta con sistemas que permiten la eficiencia energética, la calidad ambiental, el ahorro del agua y la reducción de las emisiones de C02. Pronto replicará estas iniciativas en su sede de Lima Norte.

Fuente: Publimetro/22-10-15/Pág.14/EspecialPregrado