Por MG. Carolina Muñoz Soriano, Magister en Asesoramiento Educativo Familiar. Magister en Neuropsicología y Educación. Psicoterapeuta Cognitiva Conductual. Entrenadora de Positive Discipline para Padres de Familia. Asesora Pedagógica de diferentes Proyectos Educativos en Lima y Provincia. Docente de la Facultad de Educación en USIL.

Hace más de un año que se inició la pandemia del Covid-19, con ello aparecieron las medidas restrictivas para evitar la propagación del contagio. Nuestros niños y niñas vienen enfrentando diversas situaciones como: el aislamiento en sus hogares, el contacto físico con los seres queridos, se prohibieron los espacios de socialización, el miedo a enfermarse, la incertidumbre ante los cambios socioeconómicos, la continuidad de sus estudios a través de la educación virtual, el duelo ante la perdida de familiares, entre otras situaciones que vienen afectando la salud emocional en la infancia.

Frente a estos efectos de la pandemia y bajo el contexto virtual de muchos niños y niñas debemos reconocer la importancia que tienen los padres de familia como soporte emocional, es decir son los que acompañan al menor a interiorizar y gestionar adecuadamente sus emociones desde pequeños.

Recordemos que, durante la etapa infantil, es el momento en que niños y niñas aprenden a identificar y expresar sus emociones a través de sus reacciones y cambios en su comportamiento.

¿Cómo pueden los padres de familia ofrecer el soporte emocional que requieren sus niños y niñas bajo el contexto virtual?

  1. Aprende a escuchar con el corazón, evita interrumpir. Busca conectar con su sentir, escucha sus dudas y preguntas; sin menospreciar sus ideas.
  2. Empatiza con sus emociones sin juzgar ni criticar. Manejar amorosamente los llantos y las rabietas.
  3. Busquen juntos las soluciones a las dificultades que se presenten.
  4. Expresa con gestos, abrazos, besos, palabras alentadoras entre otras acciones, lo valiosos e importantes que son ellos para ti.
  5. Informate acerca del uso adecuado de la tecnología. Establece horarios de conexión. Utiliza herramientas digitales que protejan al menor.
  6. Acompáñalo durante las horas de clase. Mantén una comunicación con los profesores de tu hijo.
  7. Cuida la rutina en casa. Respetar el tiempo libre.
  8. Realicen actividad física y recreativa en familia.
  9. Practica el tiempo fuera positivo. Respira, tómate un tiempo para buscar la calma.
  10. Sé el mejor ejemplo, los padres son los primeros referentes de manejo y control de sus emociones.
  11. Evitar los castigos físicos, la violencia sólo genera resentimiento y dolor.