Toda orientación vocacional va acompañada de un proceso en donde no únicamente se aplican pruebas psicológicas sino se busca desarrollar autoconocimiento para reconocer las fortalezas y debilidades de los evaluados y que este insight les permita estar en contacto con sus posibilidades, siendo objetivos en el momento de la decisión. Como todo en la vida, mientras más conozcamos aquello que nos hace ser lo que somos, mejores oportunidades tendremos. Por Ana Lorena Elguera, directora de la Carrera de Psicología de la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL)

Fuente: El Comercio_Suplemento / Pagina_06 / 22/10/2017