Los alumnos diseñaron y construyeron cajas pliométrica, integrando biomecánica, sostenibilidad y trabajo colaborativo aplicado al entrenamiento físico.

Estudiantes de LA USIL fabrican equipamiento deportivo en taller práctico

La Universidad San Ignacio de Loyola desarrolló un taller de elaboración de cajas pliométricas dirigido a estudiantes de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (CAFYD), una iniciativa que refuerza la formación profesional mediante una experiencia práctica orientada al aprendizaje autónomo y aplicado.

El objetivo del taller fue desarrollar competencias técnicas para diseñar, planificar y construir equipamiento deportivo seguro y funcional. Para ello, se integraron criterios de ergonomía, resistencia y calidad, junto con fundamentos biomecánicos aplicables al entrenamiento y a la evaluación física.

La actividad estuvo a cargo del jefe del Laboratorio de Biomecánica, Mg. Diomedes García, quien guio a los estudiantes en la fabricación de su propio equipamiento, utilizando materiales locales y reciclados, bajo un enfoque sostenible, accesible y de bajo costo.

Durante la jornada, los participantes analizaron materiales, elaboraron planos, realizaron procesos de ensamblaje y acabados, y ejecutaron pruebas controladas del producto final, combinando conocimientos de diseño, construcción y análisis técnico aplicados a la pliometría.

Los estudiantes destacaron el valor de una experiencia que les permitió llevar la teoría a la práctica, comprender el funcionamiento del equipamiento desde su origen y fortalecer la creatividad, así como la capacidad de adaptar materiales a diferentes objetivos deportivos.

Para Daniela Díaz, las explicaciones fueron claras y el acompañamiento constante. Además, resaltó que la actividad fomenta la innovación, el trabajo en equipo y el conocimiento de los costos asociados al material deportivo.

Francisco Farfán calificó la experiencia como “muy interesante”, ya que le permitió integrar su formación deportiva con su interés por la carpintería. Subrayó que fabricar instrumentos propios aporta un valor profesional, estimula la creatividad y reduce la dependencia de recursos externos.

Adriano Altamirano destacó que estos aprendizajes amplían su versatilidad profesional y le permiten elaborar materiales de evaluación adaptados a sus necesidades. Por su parte, Mariana Valenzuela señaló que esta habilidad es clave para su desarrollo como futura analista deportiva.

El profesor Diomedes García señaló que la universidad mantiene su compromiso con este tipo de capacitaciones prácticas orientadas a fortalecer la autonomía, la resolución de problemas y la preparación técnica de profesionales capaces de responder a las exigencias actuales del deporte.