La arqueóloga Ruth Shady expuso avances de su investigación y alertó sobre la urgencia de conservar los recursos naturales en un país megadiverso como el Perú.

Cambio climático influyó en la desaparición de Caral y el origen de nuevos asentamientos

El 2024, por primera vez, la temperatura media global superó los 1,5 °C respecto a niveles preindustrial, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), lo que encendió una alerta roja por el acelerado avance del cambio climático.  

Sin embargo, este fenómeno no es nuevo. La humanidad ha enfrentado sus efectos a lo largo de la historia. Un claro ejemplo es Caral, la civilización más antigua de América, como explicó la antropóloga y arqueóloga Ruth Shady. 

Durante su participación en una conferencia en la Universidad San Ignacio de Loyola, Shady relató que la civilización Caral enfrentó eventos climáticos muy intensos, como sequías y escasez de agua. 

“Los antiguos habitantes plasmaron este terrible proceso en figuras antropomorfas que muestran el hambre vivida por la población”, comentó la reconocida arqueóloga.  

La falta de recursos —añadió Shady— obligó a las poblaciones a abandonar los centros urbanos en busca de nuevas tierras que les garantizaran la supervivencia. 

Así, muchos migraron hacia el norte y fundaron la ciudad de Vichama, en la actual provincia de Huaura. En esta zona, también dejaron evidencias de los efectos del cambio climático.  

“Se hallaron figuras de adultos cadavéricos con estómagos vacíos y un sapo con un rayo sobre la cabeza, que representa la pronta llegada del agua”, relató la especialista.  

Shady recordó que este tipo de eventos no solo ocurrió en Perú, sino también en otras partes del mundo. En Mesopotamia, por ejemplo, otra gran civilización se vio obligada a migrar por causas climáticas similares.  

Se requieren acciones urgentes 

Ante el panorama actual, la experta enfatizó en la importancia de preservar los recursos naturales. Recordó que el Perú cuenta con mar, costa, sierra y selva, así como con 38 microclimas que sostienen una biodiversidad única.  

“Debemos actuar ahora para evitar la reducción del agua potable o la pérdida de nuestros glaciares. Somos uno de los países más vulnerables al cambio climático”, advirtió. 

A pesar de los avances en sus investigaciones sobre Caral y Vichama, Shady concluyó su exposición alertando sobre las limitaciones que enfrenta la protección del patrimonio arqueológico, debido a la falta de presupuesto, seguridad y apoyo estatal sostenido. 

Exitoso ciclo de conferencias 

Estas reflexiones se dieron en el marco del trigésimo aniversario de la USIL, que organiza un ciclo de conferencias con destacados investigadores del país. El evento es impulsado por la Facultad de Ciencias de la Salud y está abierto a la comunidad universitaria y al público general.