En un mundo hiperconectado y digitalizado es importante que los profesionales de la comunicación revaloren la ética y el rigor periodístico antes de difundir las noticias, sobre todo en las redes sociales.
Así lo explicaron destacados profesionales nacionales y extranjeros durante el “I Congreso Internacional de Comunicación y Sociedad Digital: retos para el periodismo, la comunicación corporativa y la producción cultural”, organizado por la Carrera de Comunicación de la Universidad San Ignacio de Loyola.
Los ponentes advirtieron que las nuevas tecnologías están transformando todos los modelos de negocio existentes y la forma en la que los seres humanos nos relacionamos y comunicamos.
Por ello, la codirectora del Observatorio Complutense de la Desinformación en la Universidad Complutense de Madrid, Loreto Corredoira y Lorenzo, recomendó a los periodistas adaptarse a la realidad que tiene delante y aislarse de los filtros subjetivos.
Sostuvo que en la era posverdad es importante verificar una información antes de difundirla, pues estas se expanden seis veces más rápido que las noticias reales; y en una democracia la verdad debe primar.
Juan Aurelio Arévalo Miro Quesada, director periodístico del Grupo El Comercio, señaló que las personas prefieren consumir noticias para confirmar lo que piensan, porque vivimos en burbujas donde rebotamos nuestras propias ideas y creencias; y cuando aparece una idea discrepante la rechazamos.
“El buen periodismo es decir la verdad, aunque no te guste; y para combatir las fake news el periodismo debe hacerse responsable de lo que publica, porque el problema no es la tecnología, sino la forma en que se utiliza”, añadió.
El comunicador Pedro Tenorio enfatizó sobre el grave riesgo que enfrentan los periodistas de volverse prescindibles si siguen optando por la banalidad y descuidan los elementos que son importantes para la audiencia, que busca información útil para su día a día.
En el campo académico, el director de la carrera de Comunicación de la USIL, Rolando Rodrich, destacó la importancia de la investigación y conocer cuáles son las mejores experiencias a nivel internacional para aterrizarlas a nuestras propias prácticas de excelencia.
Los expositores también coincidieron en que la pandemia por la covid-19, el contexto político, económico y social ha incrementado y estimulado la necesidad de estar más informados y mejor comunicados.
Ante esta realidad, señalaron que los profesionales de la comunicación necesitan desarrollar un conjunto de conocimientos multidisciplinarios y especializados; y, además de habilidades técnicas, aprender a gestionar estrategias para crear productos y contenidos que respondan a las necesidades de las diversidades audiencias y grupos de interés.
En otro momento, el expresidente ejecutivo del Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú, Hugo Coya, comentó la transformación de la televisión pública nacional y su inserción en Netflix gracias a “El último bastión”, primera serie nacional que llega a la plataforma mundial de streaming, la cual fue producida en 2018 por TV Perú.
La inauguración del evento estuvo a cargo del rector de la USIL, Martin Santivañez, quien destacó que la universidad es un espacio para conversar e intercambiar ideas en búsqueda del conocimiento, teniendo como base la verdad científica.
El dato:
Según The Reuters Institute Digital Report, el 52% de los peruanos comparten información por redes sociales, una cifra superior a la de Chile, Argentina y Colombia, donde las redes que más utilizadas son Facebook y WhatsApp.