El Día Mundial de la Tierra es celebrado el 22 de abril de cada año, y en ese día se toma conciencia de los recursos naturales de nuestro planeta y su manejo, educación ambiental y participación como ciudadanos ambientalmente conscientes y responsables. Este día se ha convertido en un importante evento educativo e informativo. Los diferentes grupos ecológicos se reúnen para evaluar los problemas del medio ambiente del planeta: la contaminación del aire, el agua y el suelo; la destrucción de los ecosistemas; cientos de miles de plantas y el agotamiento de los recursos no renovables.

Este día también se utiliza para insistir en soluciones que puedan eliminar los efectos negativos de las actividades humanas y todos están invitados a participar en actividades que promuevan la salud de nuestro planeta, tanto a nivel mundial como regional y local (PORRAS, 2011). Li et al. (2010) establecieron que los daños a la salud corresponden al 27% del impacto total, que es menor que el daño al ecosistema (65%), pero muy lejano al agotamiento de los recursos (8%), lo que justifica la necesidad de minimizar estos efectos. Nosotros formamos parte de la Tierra, ella nos pertenece, por eso tenemos que hacer nuestra parte todos los días. Se tiene que reflexionar cada día sobre los impactos que provocamos, y pensar, por ejemplo, cómo un gesto, aunque sea particular, puede llegar a todos los demás organismos y personas.
En el día de nuestro hogar, al que muchos llaman "madre", necesitamos, sobre todo, prestar atención a lo que hemos hecho hasta ahora y lo que vamos a hacer a partir de ese momento para construir un futuro más saludable. No todo es visible a nuestros ojos. El virus, nuestro mayor enemigo en la actualidad, pasa por millones de personas sin siquiera ser notado. A veces sin dejar rastro. En cambio, nosotros podemos ver todos los efectos que causamos en nuestro planeta tierra por la falta de educación ambiental.

Nuestros bosques son golpeados y talados, nuestros océanos son atacados día a día, las especies se extinguen y muchas se ven amenazadas. Son cambios negativos que no siempre nos impactan, y aunque se hagan notorios, hay personas que insisten en no querer verlos. Pero no se preocupe por las personas que no quieren entender esta situación. De hecho, anímelos a hacer el bien también. Lo que puede parecer un tópico, debe convertirse en un lema: "haz tu parte", al fin y al cabo, si cada uno aporta y ayuda, todos podremos curar, aunque sea poco a poco, nuestro planeta. Porque juntos somos más fuertes, juntos somos uno. Y la naturaleza, nuestra escuela de vida más importante, nos lo muestra cada vez más.

Fuentes de investigación

www.sympla.com.br/dia-da-terra-o-momento-de-cuidar-do-nosso-planeta-frente-a-novas-pandemias__835527

g1.globo.com/sp/campinas-regiao/terra-da-gente/especiais/noticia/2020/04/22/cuidar-da-terra-e-proteger-a-si-mesmo-e-a-humanidade.ghtml

Porras, J. (2011). Cuidar el planeta desde el ámbito educativo (1a ed.). Madrid, España: Visión Libros.

Li X., Zhu Y. and Zhang Z. (2010), An LCA-based environmental impact assessment model for construction processes. Building and Environment, 45(3):766-775.

Escrito por:

Jesus Marino Falcón Roque
Profesor a tiempo completo de la carrera de Ingeniería Ambiental de la USIL con grado de doctor en la especialidad de Electroquímica y Corrosión, con énfasis en procesos de electrodeposición y sistemas de protección activa contra la corrosión de metales.