El deporte y los estudios representan una combinación perfecta que conduce al éxito, y no solo hablamos del plano deportivo-competitivo, sino también del que está orientado al plano personal, social, educativo, salud, entre otros. Asimismo, las universidades tienen la responsabilidad de brindar las condiciones básicas para garantizar la promoción y el desarrollo del deporte universitario como herramienta complementaria para la educación integral del estudiante. En el Día Internacional del Deporte Universitario, planteamos cinco razones de su éxito:
- Bienestar y salud personal. Sabemos que la práctica deportiva contribuye sustancialmente en mejorar y mantener una adecuada condición física, prevenir enfermedades asociadas al sedentarismo, ayuda a manejar situaciones de estrés y frustración, fortalece la autoestima, entre muchos otros beneficios que hacen que la vida universitaria sea una etapa inolvidable en las personas, pero, sobre todo, que se genere la adherencia a la práctica regular del deporte como herramienta fundamental que sustente la calidad de vida.
- Habilidades blandas. El deporte está asociado a muchos beneficios biopsicosociales, pero también constituye un factor diferencial en la formación académica, logrando que los estudiantes adopten una mayor responsabilidad en sus deberes, se fortalece el respeto a las normas, una mayor disciplina, se desarrolla la empatía, la comunicación y la asertividad. Asimismo, ayuda a comprender la importancia del esfuerzo individual y colectivo como eje fundamental para alcanzar el éxito. Todo lo mencionado son elementos propios del deporte que actúan como herramientas desarrolladoras de las habilidades blandas. Y en la actualidad, estas cada vez son más solicitadas por las diferentes organizaciones, tales como la orientación a los logros, el trabajo en equipo, la disciplina, entre otros.
- Organización y creatividad. El estuante universitario que practica deporte, por lo general, es organizado (a), estructura mejor sus horarios tanto académicos como deportivos y es creativo (a). Las mismas situaciones deportivas que constantemente retan a los deportistas, hacen que desarrollen la creatividad para resolver distintos contextos durante el juego, y esto se aterriza perfectamente en un mejor aprovechamiento académico, fortaleciendo de esta manera la capacidad resolutiva de problemas y volviéndolo productivo en la búsqueda de soluciones.
- Desarrollo de líderes. En los últimos años el deporte ha evolucionado considerablemente, llegando a ser una necesidad social por los múltiples beneficios que trae consigo. Las personas hoy en día solicitan más y mejores propuestas deportivas con sello de calidad y que satisfagan las diferentes necesidades, por ello es necesario la formación de los nuevos líderes del deporte, que sepan adaptarse a los nuevos entornos con propuestas sólidas, coherentes y sostenibles. De esta manera se destaca, una vez más, la importancia del deporte universitario como herramienta formativa de los futuros líderes, que sepan organizar, dirigir y adaptarse a las tendencias y demandas de la sociedad. Es importante mencionar que, en este proceso, la universidad también juega un rol importante en el acompañamiento constante y, sobre todo, flexibilizando los procesos e incentivando la práctica del deporte, como lo hace la USIL, otorgando becas, flexibilidad en horarios, tutorías personalizadas, entre otros beneficios.
- Profesionalización. El deporte universitario no tendría lugar si no se tienen a los profesionales que impulsen el desarrollo deportivo desde sus diferentes ámbitos de acción. Para ello es imprescindible no solo contar con una carrera que forme profesionales en el deporte, sino también garantizar que dicha formación logre que el estudiante adquiera las competencias necesarias para desenvolverse eficientemente en el ámbito laboral con metodologías que estén a la vanguardia. En este sentido, la carrera de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la USIL, (la primera en el Perú) brinda una formación integral con un sólido soporte tecnológico, laboratorios de alta especialización que guardan relación con el entorno real de actuación, acompañamientos, flexibilidad en horarios y mucho más, acciones que permiten una correcta formación profesional en el rubro y, por ende, nuevos líderes del deporte.
Fuentes de investigación: