Augusto Ayesta es egresado de la carrera de Comunicaciones de la Universidad San Ignacio de Loyola. Hace ocho años creó Trend, una agencia boutique de PR y reputación que ha asesorado a más de 40 marcas desde que inició operaciones.
¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?
Veo muchos temas. Es tan rico trabajar en Comunicaciones. Trabajo con marcas que están el rubro industrial, turismo, tecnología, entre otros. Se puede hablar de muchas cosas, que cambian constantemente. Todos los días se puede comunicar algo nuevo. Entonces, lo que más apasiona de mi carrera es la variedad de temas que puedo abordar y la posibilidad de hacer que marcas y personas se entiendan, conversen. Finalmente, eso impacta para que el mercado sea mejor, incluso, la sociedad. Hay mejor información, más transparencia. Creo que la comunicación hace posible todo eso.
¿Qué funciones desempeñas en el Trend?
Trend fue mi emprendimiento, la creé en el 2012. Siempre tuve la intención de hacerlo. Soy parte de la primera promoción de la carrera de Ciencias y Tecnologías de la Comunicación, así se llamaba cuando ingresé en 1997. En ese entonces, el lema de la universidad era formar empresarios, y eso fue algo que me impactó, el tema del emprendimiento. Comencé Trend solo. Ahora somos un equipo de 15 personas, tenemos un buen posicionamiento como empresa de PR. Mi labor es pilotear la nave. Superviso la gestión de la marca, la estrategia, la relación con los clientes y, claro, acompaño a mi equipo. Además de ser la voz de la marca, también cumplo un rol de coach, de mentor, llevando la experiencia a todo el equipo y retroalimentándonos.
¿Cómo ha cambiado la dinámica de trabajo en tu empresa ha raíz la pandemia?
Siempre hemos ido una agencia singular. La flexibilidad es parte de nuestro ADN, así como la capacidad para adaptarnos. Ya hacíamos home office una vez por semana antes de la pandemia. Considero que uno no tiene que estar sentado en un escritorio de 9:00 a. m. a 6:00 p. m. para ser productivo. Cuando existe compromiso, objetivos claros y una correcta comunicación en el equipo pues se puede continuar concretando metas sin necesidad de estar en el mismo espacio. De hecho, ha sido un reto aprender a trabajar de forma remota al 100 %, pero lo hemos logrado. Hemos aprendido y hoy tenemos una buena dinámica de trabajo remoto y planeamos quedarnos así por un tiempo.
¿Por qué decidiste estudiar Comunicaciones?
Exploré varias opciones. Los test vocacionales que tomé también me ayudaron a tomar una decisión, que, finalmente, fue bien intuitiva. Me gustaron los temas que se veían en la carrera y el campo de acción. En ese momento se hablaba de comunicación empresarial, le hice caso a mi intuición y no me equivoqué.
¿Qué viste en la USIL para elegirla tu universidad para pregrado?
Me gustó que sea una universidad proactiva. En esa época, la admisión a través de colegio era una novedad y a mí me invitaron a participar, así que eso me llamó la atención. Me pareció una universidad ágil y moderna, y me sentí atraído por su propuesta. Sobre todo, por su visión empresarial y eso se reflejaba en los cursos que dictaban como Gerencia, Estadística, Contabilidad. En otras carreras de Comunicación esas materias ni se asomaban. Eso me atrajo e influyó en mi decisión de emprender.
¿Cuáles herramientas te dio para ejercer tu profesión?
Creo que la universidad te da esa visión global, integradora, multidisciplinaria de los procesos en los negocios, porque no solo aprendí de Comunicación, también de otros temas vinculados al mundo empresarial y también de Humanidades. La USIL me dio una formación integral. Más que herramientas, porque considero que estas pasan rápido, me enseñó a ver de forma estratégica las cosas y eso, para mí, es imprescindible cuando estamos hablando de emprendimientos.
Sobre Comunicaciones
La carrera de Comunicaciones de la USIL forma líderes integrales del sector que hoy exige el mundo, desarrolladores de planes estratégicos que generen impacto a nivel local e internacional. Entérate más aquí.