La Facultad de Derecho de la USIL organiza el III Congreso de Relaciones Internacionales el 12, 13 y 14 de noviembre. Prestigiosos juristas del mundo se reunirán para exponer sus conocimientos y discutir los avances en temas de cooperación internacional, diplomacia, comercio mundial, seguridad internacional y derechos humanos.  

Como un adelanto a lo que será su participación en esta jornada, el licenciado y doctor en Derecho, Rafael García Pérez, quien además es docente de Historia del Derecho e investigador del Instituto Cultura y Sociedad de la Universidad de Navarra, comparte interesantes puntos de vista sobre su especialidad, los derechos humanos (DD. UU.). 

¿Cuáles hitos marcaron la historia de los DD. UU.? 

Desde mi punto de vista, hay dos momentos claves en la historia de Occidente. El primero son las revoluciones liberales de finales del siglo XVIII, como la francesa, la norteamericana, las revoluciones hispanas, a partir de las cuales se formula un concepto nuevo de derechos aplicado a los individuos. Sin embargo, estas formulaciones no son propiamente DD. HH., porque no se reconoce una igualdad absoluta de los derechos, ya que hay sectores de la población a la cual se le priva de estos. Se puede decir que estos derechos son un hito ya que rompen una dinámica histórica o la del periodo colonial en América, pero no consolidan una concesión de todos los DD. HH. En ese sentido, me parece que el segundo hito fundamental es la Declaración Universal de Derechos de 1948, ya que, a pesar de las circunstancias difíciles de la Segunda Guerra Mundial, los países que formaban parte de las Naciones Unidas -de procedencia, ideología y religiones distinta-, consiguieron algo que a estas alturas de la historia parece imposible: redactar una declaración de derechos en la cual no hubo ningún voto en contra en la Asamblea Nacional de los Derechos Humanos.  

¿Por qué considera necesario conocer esos momentos fundacionales de su historia? 

Tuve un profesor en la universidad que decía: “La historia no sirve para nada, pero el que no la sabe, no sabe nada”. La historia nos da la perspectiva adecuada para entender los DD. UU. hoy. Los derechos nacen, evolucionan y viven en ella. Si no conocemos su origen y formulación, no es posible saber qué filosofía hay detrás de ellos, cuáles circunstancias históricas han permitido su evolución o cuáles problemas han ocurrido durante su avance. De alguna manera, la historia te da el marco interpretativo de los derechos y, en muchos casos, actúa como legitimadora de ellos. Es muy difícil entender los debates, los dilemas en la aplicación de los DD. UU. en los distintos ámbitos si uno no tiene claro cómo hemos llegado hasta este momento. Conocer la historia no soluciona el futuro, pero te permite comprender el presente y dialogar acerca de ellos. 

¿Cómo describiría la situación actual de los DD. UU. en el mundo? 

Es una pregunta muy difícil de responder, porque depende de cada país. El panorama nunca ha sido bueno ni lo será. Los DD. UU. son como un lente que nos permite apreciar la realidad para descubrir males que antes no veíamos. El problema es que el mundo es muy grande y pasan muchas cosas en los países. Sin embargo, no hay que perder de vista que siempre hay una perspectiva desde la cual se analizan y esta no es común en todo el mundo. Por tanto, debido a la complejidad del tema y a las distintas visiones, es difícil afirmar como están en el mundo. Creo que los DD. UU. tienen un punto de utopía. Aunque son un instrumento extraordinario de preservación de la humanidad y de entendimiento de los países, no llegará el momento en que se vivan igual en todo el mundo.  

¿Cómo debemos entender los DD. UU. hoy? 

No es sencillo hacer esta evaluación, porque no hay una única interpretación. Cuando se elaboró la declaración del año 1948, los redactores acordaron cuáles son estos derechos, pero no definieron el por qué. En ese sentido, cada persona interpreta los DD. UU. a su manera. En mi opinión, debemos volver la esencia de estos, ya que últimamente se están multiplicando de una manera innecesaria. Hoy, por ejemplo, hablamos de los DD. UU de tercera generación, que abarca la protección del medio ambiente, desarrollo de los países, la paz, pero, desde mi punto de vista, no son derechos. Son bienes que hay que proteger, pero no hace falta acudir al instrumento de los DD. UU. para ello. Cuanto más los multipliquemos, menos validez van a tener.   

¿Por qué es importante contar con más profesionales de Relaciones Internacionales enfocados en este tema? 

Hay grandes áreas de trabajo donde los graduados pueden desempeñarse profesionalmente. Pienso en instituciones internacionales u ONG que se dedican a velar por los DD.UU. En el mundo empresarial también se necesitan abogados especialistas en derechos humanos, ya que los negocios que llevan a cabo plantean problemas jurídicos que tienen que ver con DD. UU. Asimismo, se puede desempeñar en los sectores cuya actividad económica está relacionada con el medio ambiente. Es un ámbito enorme de posibilidades que está esperando a buenos graduados, como los que estudian en la USIL, y que pueden hacer mucho para el progreso del mundo.    

Si quieres inscribirte en III Congreso de Relaciones Internacionales, ingresa aquí: https://www.usilonlife.com/producto/iii-congreso-de-relaciones-internacionales/ 

Sobre Relaciones Internacionales 

La carrera de Relaciones Internacionales de la USIL forma profesionales que se puedan desarrollar en importantes sectores políticos, empresariales y académicos dominando idiomas y conocimientos multidisciplinarios en historia, política, derecho y negocios. Entérate más aquí.