Hoy no solo es un día para celebrar, es un día para reflexionar. Formar a los futuros Nutricionistas del país es una gran tarea, un gran reto, un honor, pero también una enorme responsabilidad. Ya que la nutrición es uno de los pilares del desarrollo individual y poblacional, es un derecho al que todas las personas desde el inicio de su vida deben acceder. Lamentablemente hoy las enfermedades que ocasionan la mortalidad más alta en el mundo y en nuestro país están ligadas a un inadecuado estado nutricional.
Es por lo que en la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad San Ignacio de Loyola, cuando formamos a los futuros nutricionistas pensamos en que nuestros estudiantes serán los profesionales de excelencia en nutrición del mañana. Los que el mundo necesita para ser la luz en la vida de las personas y poblaciones a través de una óptima nutrición que permita tener niños saludables y felices, con todo su potencial cognitivo desarrollado, porque su mamá tuvo una buena nutrición durante la gestación. Adultos productivos que no tuvieron problemas de aprendizaje, ya que siguieron recibiendo una adecuada nutrición durante su niñez y adolescencia, ancianos lúcidos y activos, porque cuidaron su alimentación y salud en los años previos.
Para esto buscamos que nuestros estudiantes, desde el primer día se comprometan a estudiar con responsabilidad cada materia o curso de la carrera, investigando cada tema a profundidad, debatiendo con sus compañeros y profesores, exigiendo siempre saber más. Participando de cada actividad que realice la carrera, cada experiencia que les permita conseguir una formación más sólida.
Y que cuando egresen y sean ya nutricionistas, se comprometan a capacitarse constantemente en los diversos problemas de salud para a través de la investigación y basados en evidencia científica, brinden el mejor tratamiento nutricional a sus pacientes y proponer soluciones a la salud y nutrición pública. Actuando siempre con ética, calidez y respeto, buscando el bienestar de las personas ante todo y contribuir al desarrollo del país y del mundo.
La Universidad San Ignacio de Loyola, celebra el Día del Nutricionista Peruano y reafirma su compromiso de formar a los mejores profesionales, aquellos que contribuirán al desarrollo que todos queremos y que merecemos.
