El aceite de coco se promociona como saludable, pero la evidencia científica advierte riesgos por su alto contenido de grasas saturadas.

Por: Juana Zavaleta Melgar, docente de la carrera de Nutrición y Dietética de USIL. Dra. en Alimentos y Nutrición.

Los lípidos son parte esencial del organismo de los seres humanos, ya que cumplen funciones importantes como: reserva energética, formación de membranas celulares y síntesis de algunas hormonas y vitaminas. Los lípidos que provienen de la dieta se conocen como grasas (sólidas) y aceites (líquidos), y se obtienen a partir del consumo de alimentos naturales o de alimentos transformados.

Aceite de coco y sus supuestos beneficios 

Cuando se trata de alimentarse, las revelaciones sobre nuevos alimentos siempre llaman la atención, sobre todo si la difusión es masiva en redes sociales. Así, el aceite de coco ha irrumpido como una fuente de grasa promocionada como saludable. Se le adjudican beneficios como estimular la función inmune, equilibrar hormonas tiroideas, curar enfermedades cardiovasculares, favorecer la disminución de peso, mejorar la glicemia y regular el tránsito intestinal, entre otros. 

¿Es aceite o grasa? 

Las grasas alimentarias se componen de una mezcla de ácidos grasos y su composición varía según su origen: animal o vegetal. 

  • Aceites: son las grasas con mayor proporción de ácidos grasos insaturados, y que suelen ser líquidas a temperatura ambiente. 

  • Grasas: se denomina así al tipo de grasas con mayor proporción de ácidos grasos saturados, que suelen ser sólidas a temperatura ambiente. 

Por lo tanto, el término “aceite de coco”, como se le conoce popularmente, no es del todo correcto, ya que es sólido a temperatura ambiente debido a su alto contenido en ácidos grasos saturados. En efecto, el 91 % de los ácidos grasos del coco son saturados, con predominancia de ácido láurico, mirístico y palmítico. 

Evidencia científica y consumo 

La combinación del conocimiento establecido sobre los efectos negativos de las grasas saturadas en la salud cardiovascular y la falta de evidencia de ensayos clínicos que demuestren un beneficio del consumo del “aceite de coco” en enfermedades cardiovasculares y metabólicas, desaconsejan su consumo como fuente preferente de grasa dietética. 

Recomendaciones internacionales 

La OMS, al igual que la Asociación Estadounidense del Corazón, no recomienda el uso regular de grasas saturadas como fuente principal de grasa. El riesgo está en que pueden aumentar el colesterol LDL y, con ello, las enfermedades cardíacas. La recomendación general de la OMS es limitar el consumo de grasas saturadas a menos del 10 % de la ingesta calórica diaria y sustituirlas por grasas insaturadas, como las de los aceites vegetales

 

Fuentes: 

  1. Arias Benavides D, Ángel Plata N, Arenas Beltrán MA, Ariza Muñoz DV, Aldana Parada DJ, Arango Lozano M, Amador Buitrago MC, Mora Plazas M, Gómez Gutiérrez LF. Grasa y aceites provenientes de la dieta: consideraciones para su consumo en la población colombiana. Univ. Med. 2022;63(1). 

  2. Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT). Efecto del consumo de aceite de coco y factores de riesgo cardiovascular: resultados de una revisión sistemática y un metaanálisis de ensayos clínicos [Internet]. Fundación Iberoamericana de Nutrición; 31 marzo 2020 [citado 2025 Sept 3]. 

  3. Spiazzi BF, Duarte AC, Zingano CP, Teixeira PP, Amazarray CR, Merello EN, Wayerbacher LF, Farenzena LP, Correia PE, Bertoluci MC, Gerchman F, Colpani V. Coconut oil: an overview of cardiometabolic effects and the public health burden of misinformation. Arch Endocrinol Metab. 2023 Jun 19;67(6):e000641. doi: 10.20945/2359-3997000000641. PMID: 37364144; PMCID: PMC10660992. 

  4. St-Onge MP, Mayrsohn B, O’Keeffe M, Kissileff HR, Choudhury AR, Laferrère B. Eur J Clin Nutr. 2014 Oct; 68(10):1134-40. 

  5. Neelakantan N, Seah JYH, van Dam RM. The Effect of Coconut Oil Consumption on Cardiovascular Risk Factors: A Systematic Review and Meta-Analysis of Clinical Trials. Circulation. 2020 Mar 10;141(10):803-814. doi: 10.1161/CIRCULATIONAHA.119.043052. Epub 2020 Jan 13. PMID: 31928080. 

  6. World Health Organization: Alimentación sana