Los modelos de negocio afrontan cada día diferentes situaciones que pueden afectar directamente su rentabilidad y crecimiento. Sea cual sea la industria en la que se encuentre, si bien una de las principales características de la disrupción se basa en el diseño de una propuesta de valor diferente, también se encuentra presente en los otros componentes del ya conocido Business Model Canvas de A. Ostelwalder e Y. Pigneur. Para lograrlo, muchas veces es necesario considerar un proceso de transformación digital, lo cual podría conllevar a realizar un cambio total en la forma en cómo vamos a hacer negocios.
A continuación, presentamos cinco características que hacen a un modelo de negocio disruptivo:
- Tener en claro cuál es la problemática a atender y quién es el cliente objetivo. Es importante saber el comportamiento y las necesidades del mercado, a quién van a cobrar, qué consumen, cómo se desenvuelven, cómo se desarrolla su experiencia de usuario, entre otros. Esto permite identificar dónde es que se puede presentar la oportunidad de diseñar y diferenciar nuestra propuesta de valor. Metodologías ágiles como Design thinking y SCRUM permiten llegar a conocer y entender qué piensan y sienten sus clientes sobre un determinado problema.
- Conocer a profundidad a los competidores. No solo se trata de saber qué ofrecen los competidores, sino también probar sus productos, hacer seguimiento de sus movimientos, estrategias, así como conocer su proceso de servicio y entrega. Esto permite saber qué posibles limitaciones, ventajas y desventajas puede tener nuestro modelo de negocio y nuestra propuesta de valor frente a lo que actualmente se viene desarrollando en el mercado.
- Contar con un alto grado de digitalización. El uso de tecnologías como la inteligencia artificial, IoT (Internet of Things), Machine Learning o Big Data forma parte fundamental para la actualización permanente de su propuesta de valor, así como mantener una adecuada relación con los clientes bajo los canales de distribución y comunicación adecuados. Todo esto contribuirá a que la experiencia del usuario sea lo más confortable posible.
- Estar integrados con el ecosistema de negocios. La sostenibilidad se logra también obteniendo valor de sus socios claves, lo que hace que se desenvuelvan en un ecosistema de negocios y se promueva la generación de alianzas de cooperación estables en temas como tecnología, calidad o logística. Aquí cada miembro del ecosistema es especialista en su ámbito y puede tomar sus propias decisiones de inversión. Asimismo, es mucho más ágil, ya que se trata de una coordinación horizontal entre miembros autónomos.
- Son escalables. El modelo de negocio está diseñado para que sea de escalabilidad rápida como elemento vital en una economía que, hoy por hoy, es global. Aquí la transformación digital cumple un papel importante facilitando este efecto.
Algunos modelos de negocio disruptivos que podemos mencionar son Netflix y Rappi. Ambos cumplen con las características señaladas. Brindan un servicio donde la tecnología es fundamental para su funcionamiento, utilizan el analitycs machine learning para que, según lo que el usuario consume, la misma aplicación pueda recomendar nuevas alternativas alineadas a sus gustos. Su escalabilidad se hace evidente mediante su presencia en diferentes países del mundo donde también se encuentran integrados con su ecosistema, y su propuesta de valor rompió el esquema de negocios tradicionales como son el alquiler o la compra de películas en físico (Netflix) y envío de encargos, comida o medicinas (Rappi).
Finalmente, cabe recalcar que ningún modelo de negocio inicia completo. Estos pasan por un proceso de experimentación y de evolución centrado en el cliente, que involucra innovación y transformación digital, tanto en procesos como en productos, que los conllevarán a lograr la disrupción en sus mercados objetivo.
Fuentes de investigación:
El diseño de modelos de negocio disruptivos. Enrique de la Puerta, profesor asociado en el IE Business School. Harvard Deusto. Business Review.
