Uno de los mayores desafíos para los emprendedores peruanos es el acceso a financiamiento.

Emprender en el Perú después de la crisis del COVID-19

Emprender en el Perú, como en cualquier otro lugar del mundo, conlleva una serie de retos y desafíos. En un contexto de economía emergente, con una estructura económica compleja y en constante cambio, los emprendedores peruanos deben enfrentar obstáculos que van desde la falta de financiamiento, hasta la burocracia estatal y la informalidad.

Uno de los mayores desafíos para los emprendedores peruanos es el acceso a financiamiento. Nuestro sistema se caracteriza por su falta de acceso y por la falta de una cultura de préstamos. Así, en algunas ocasiones, puede ser de difícil acceso, en razón a los múltiples requisitos solicitados por las entidades para realizar la evaluación crediticia necesaria, así como por contar con elevados costos asociados a un préstamo (tasas de interés, comisiones, gastos, entre otros), lo que ocasiona que muchos emprendedores suelan encontrar dificultades. Por ello, a menudo, se ven obligados a buscar fuentes alternativas de financiamiento, como “inversionistas ángeles” o Crowdfunding  (Redacción Digital, 2020).

Otro reto importante es la burocracia estatal: la creación de una empresa en el Perú puede ser un proceso largo y complicado, con múltiples trámites y requisitos legales que cumplir. Además, la carga tributaria es alta, lo que aumenta los costos operativos y reduce la rentabilidad de los emprendimientos. Asimismo, la informalidad es un problema grave en el Perú. Muchos emprendedores trabajan en sectores informales, que no están regulados por el gobierno. Esto puede limitar el acceso a financiamiento y a otros recursos, y aumenta los riesgos para los emprendedores y sus negocios.

A pesar de estos desafíos, existen oportunidades para los emprendedores peruanos. La economía peruana está en crecimiento, y hay una gran demanda de bienes y servicios en muchos sectores. A su vez, el gobierno ha tomado medidas para fomentar el emprendimiento y reducir la burocracia, como la creación de ventanillas únicas para la creación de empresas.

La experiencia de 2020 con el evento excepcional de la crisis sanitaria ha llevado a empresas e instituciones a enfrentar el desafío del COVID-19 de manera rápida implementando nuevos procedimientos y prácticas gerenciales (Roca Rey, 2021). Dado que la crisis sanitaria ha impuesto un distanciamiento social sin precedentes, conciliar la distancia y la proximidad se ha convertido en un desafío de gestión esencial para las organizaciones.

Un gran número de análisis han subrayado la importancia de los valores culturales de las organizaciones frente a la crisis. Si la crisis del gran confinamiento demuestra su impacto a nivel organizacional y especialmente a nivel del “cómo hacer” con las nuevas formas de trabajar, también puede ofrecer la posibilidad de repensar el “por qué” y por ende la cultura de las organizaciones (Morales Tristán, 2020).

¿Se trata entonces de saber cómo mantener y garantizar el vínculo social? ¿Cómo luchar contra el sentimiento de aislamiento y desarrollar la solidaridad, la inclusión y el espíritu de equipo? ¿Cómo restaurar el significado y los puntos de referencia para los empleados con el fin de asegurar y comprometerse? ¿Cómo dar sentido a todas las actividades, profesiones y misiones de la organización? Las empresas necesitan cambiar mentalidades y comportamientos. Esta evolución de la cultura se basa en el reconocimiento de su importancia por parte de todos los actores. ¿Qué son los valores y cómo se manifiestan? ¿Cómo mutar sin negar tu ADN? ¿Cómo actualizar la cultura y los referentes comunes de una organización? ¿Cómo reafirmar y declinar sus valores?

Al apoyar las transformaciones actuales las organizaciones no sólo podrán hacer que las experiencias de los empleados sean más positivas, sino que también se prepararán mejor para la resiliencia y la lucha contra la fragilidad del mundo laboral del mañana.

Otro de los principales desafíos es la incertidumbre económica. La pandemia ha afectado a la economía global y muchas empresas han cerrado -o han reducido significativamente sus operaciones- (The World Bank, 2021). Los emprendedores deben ser conscientes de esta realidad y planificar cuidadosamente para asegurarse de que su negocio sea resistente a las fluctuaciones económicas y capaz de adaptarse a los cambios en el mercado. Por otro lado, tenemos, como ejemplo, la necesidad de adaptarse a un entorno empresarial totalmente cambiante: muchos consumidores han cambiado sus hábitos de compra y han optado por el comercio electrónico y las entregas a domicilio (Perú Retail, 2022). Los emprendedores deben ser capaces de adaptarse a estos cambios y encontrar nuevas formas de llegar a sus clientes.

La tecnología también viene jugando un papel importante en el mundo empresarial/emprendedor post COVID-19. Los emprendedores deben ser capaces de utilizar la tecnología para mejorar la eficiencia y reducir los costos (Álvarez Aranzamendi, 2020). Adicionalmente, deben estar preparados para abordar los riesgos de seguridad en línea y proteger los datos de sus clientes.

En resumen, emprender en el Perú puede ser un desafío, pero con la perseverancia, creatividad y una buena gestión de los recursos, es posible superar estos obstáculos y tener éxito. Los emprendedores peruanos deben estar dispuestos a adaptarse a un entorno en constante cambio y buscar oportunidades en los sectores emergentes de la economía. Por otro lado, la aventura/reto de emprender en la época post COVID-19 sigue siendo un desafío, pero también ofrece grandes oportunidades. Los emprendedores deben estar preparados para adaptarse a un entorno empresarial cambiante y utilizar la tecnología de manera efectiva para mantenerse a la vanguardia. Con una planificación cuidadosa y una mentalidad innovadora, es posible crear un negocio exitoso en esta nueva era.

Fuentes de investigación

Roca Rey, V. (2021). ¿Emprender en el Perú? Recuperado el 13 de marzo de 2023, de Diario Gestión: https://gestion.pe/blog/conciencia-corporativa/2021/06/emprender-en-el-peru.html/

Redacción Digital. (2020). El monto promedio que destinan los inversionistas ángeles en Perú es US$54,864. Recuperado el 18 de marzo de 2023, de Revista Gana Más: https://revistaganamas.com.pe/el-monto-promedio-que-destinan-los-inversionistas-angeles-en-peru-es-us-54864/

The World Bank. (2021). The Global Economy: on Track for Strong but Uneven Growth as COVID-19 Still Weighs. Recuperado el 18 de marzo de 2023, de The World Bank - News: https://www.worldbank.org/en/news/feature/2021/06/08/the-global-economy-on-track-for-strong-but-uneven-growth-as-covid-19-still-weighs

Álvarez Aranzamendi, H. (2020). El Rol de la Tecnología en el nuevo contexto de COVID-19. (E. USMP, Editor) Recuperado el 19 de marzo de 2023, de USMP Digital: https://www.administracion.usmp.edu.pe/revista-digital/numero-4/el-rol-de-la-tecnologia-en-el-nuevo-contexto-de-covid-19/

Perú Retail. (2022). Comercio electrónico creció 55% en el Perú en el 2021. Recuperado el 20 de marzo de 2023, de Perú Retail: https://www.peru-retail.com/comercio-electronico-crecio-55-en-el-peru-en-el-2021/

Morales Tristán, O. (2020). Valores culturales: Cambios globales a raíz de la crisis causada por el coronavirus. Recuperado el 8 de abril de 2023, de Conexión ESAN: https://www.esan.edu.pe/conexion-esan/valores-culturales-cambios-globales-a-raiz-de-la-crisis-causada-por-el-coronavirus

 

Escrito por:

Diego Sebastián Sánchez Chumpitaz

Coordinador de la carrera de Administración & Emprendimiento de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad San Ignacio de Loyola.