El teléfono en su funcionalidad básica fue inventado por Antonio Meucci a finales del siglo XIX, llamado en ese momento teletrófono, para comunicar su oficina con el dormitorio de su esposa enferma, que se encontraba en el segundo nivel de su casa. Posteriormente patentado por Alexander Graham Bell. Estaba diseñado para transformar impulsos eléctricos en la voz humana. A lo largo de casi 100 años de historia el teléfono ha evolucionado hasta convertirse en las minicomputadoras de mano que nos hacen la vida más conectada y productiva hoy.

A diferencia de la portabilidad de los celulares de hoy en día, los primeros teléfonos eran fijos y necesitaban de una manivela para su funcionamiento. Por cierto, en esa época, las llamadas se hacían a través de una operadora que comunicaba a los interlocutores. Con la llegada del disco rotatorio (donde se marcaban los números del 0 al 9) se dejó atrás la necesidad de una operadora para realizar llamadas; pero fue hasta 1884 que se lograron hacer llamadas a larga distancia, la primera fue entre los estados de New York y Boston, Estados Unidos. 

En 1973 el ingeniero estadounidense Martin Cooper de Motorola, conocido como el padre del teléfono móvil, hizo la primera llamada sin cables. El primer teléfono celular medía unos 25 x 5 x 10 centímetros y pesaba más de un kilo, su carga sólo permitía hablar por 20 minutos. “Antes del celular, cuando hacías una llamada telefónica, estabas llamando a un lugar; ahora, llamas a una persona, y ese es un cambio profundo”, relató Cooper en una entrevista para la BBC, gran hito en la historia de la movilidad de las comunicaciones ciertamente.

Los teléfonos inteligentes fueron el mayor cambio en la historia de los teléfonos móviles. Por un lado, cambió la funcionalidad, incorporando muchos aspectos de las computadoras, la llegada de los Smartphones implantó la necesidad de grandes pantallas, los cuales gozan de un uso masivo por parte de la población, se estima que a finales del 2021 había unos 3.900 millones de usuarios de smartphones a nivel global.

Ciertamente para las empresas la adaptación al formato móvil en sus productos y servicios es vital para su desarrollo. Un buen contenido optimizado para smartphones, plasmado de manera atractiva, intuitiva, sencilla y eficiente ayudará a que la experiencia de usuario sea satisfactoria. El desarrollo de productos y servicios innovadores está ligado en la actualidad a su facilidad de vinculación con smartphones y de la misma manera a su empleo a través de estos. Los dispositivos móviles crean multitud de oportunidades de negocio, y estas se pierden si no se aprovecha esta característica del mercado. Con los Smartphones, las empresas en la actualidad pueden ofrecer servicios y productos a domicilio, así como llevar el control de su propio negocio físico, en cualquier área del planeta. La tecnología está de nuestro lado en las futuras décadas, como empresarios y clientes, ya que todo se encuentra al alcance de uno de estos celulares inteligentes, que pueden almacenar grandes cantidades de información importante, multitud de aplicaciones y programas diversos. Gracias a los Smartphones tenemos en nuestras manos todo lo que necesitamos como empresarios y clientes.

Escrito por:

Freddy Asturrizaga Rios
Docente a tiempo completo en USIL.