El fútbol se configura como uno de los deportes que genera mayor fanatismo, sobre todo, en el marco de competencias como la Copa Mundial de la FIFA. A primera vista puede parecer que no existen puntos en común con los procesos de acreditación, pero al analizarlos con detenimiento se puede notar que sí los hay. A continuación, presentamos cinco semejanzas entre el fútbol y la acreditación. A través de estas analogías se podrá comprender mejor la labor de diversos actores en los procesos de calidad educativa de las casas de estudio.
1. Liderazgo y disciplina
Este componente es esencial para que tanto las diversas áreas de la institución como los diversos grupos de interés estén articulados y participen de manera colaborativa en los procesos de acreditación. Alumnos, docentes, colaboradores, egresados, consejos consultivos y empleadores son piezas clave para la consecución del objetivo. El área que lidera el proceso de acreditación cumple la función de director técnico o DT, guiando y acompañando a los actores que intervienen.
2. Autoconocimiento
En el fútbol, hacer un diagnóstico del equipo a través de la identificación de las fortalezas y los puntos de mejora de los jugadores es vital para obtener los mejores resultados en los torneos nacionales e internacionales. De igual manera, las casas de estudio realizan una autoevaluación o autoestudio en el que se presentan evidencias para el cumplimiento de estándares. A través de este ejercicio se definen aquellos puntos que deben ser potenciados a fin de alcanzar los resultados esperados.
3. Reglas de juego
Los modelos de acreditación establecen lineamientos y estándares claros que deberán ser cumplidos en cada una de las fases del proceso, culminando con la obtención de la credencial. En el fútbol, cada torneo tiene reglas definidas que deberán ser cumplidas por todos los participantes que les permitirán seguir avanzando hacia objetivo final y así, obtener buenos resultados. Las agencias acreditadoras son los veedores permanentes que cumplen un rol similar al de un árbitro.
4. Entrenamiento continuo
El entrenamiento sostenido de un equipo de fútbol demuestra constancia y disciplina para mejorar o mantener los niveles esperados de todos los miembros del equipo. En el ámbito educativo, los procesos de acreditación exigen el mantenimiento de los esfuerzos para no perder el nivel de excelencia alcanzado. Ello es definido como “Mejora continua”.
5. Premio al esfuerzo
La obtención de un título de un torneo es semejante a la de una acreditación nacional o internacional. Ambas cierran satisfactoriamente una etapa que pone en evidencia un nivel de exigencia muy alto, el cual deberá ser mantenido y potenciado en el tiempo.