¿Problemas con algún curso? La etapa universitaria está llena de retos, pues las materias tienen un alto grado de exigencia que no solo pondrán a prueba las habilidades y los conocimientos adquiridos, sino intervendrán otros componentes que decantarán en el éxito o fracaso del estudiante. La frase “estoy solo” quedó atrás. Las universidades cuentan con una serie de mecanismos de asesoramiento (también conocido como assessment) que identificarán las oportunidades de mejora del alumno para potenciar los resultados y elevar el rendimiento académico.
El progreso es relevante en la universidad, por ello las mejores casas de estudio cuentan con áreas de evaluación y seguimiento del desempeño académico. Se brindan soluciones efectivas para orientar el performance de los estudiantes, por ejemplo: asesorías, tutorías y programas de formación integral. Los docentes o asesores son actores importantes en esta tarea; sin embargo, la responsabilidad, el orden y la perseverancia del estudiante serán aspectos decisivos para alcanzar las metas trazadas. El diseño de estrategias de aprendizaje adaptadas a cada perfil, optimiza el desenvolvimiento de los estudiantes en riesgo académico.
¿Por qué la acreditación considera este tópico? Los procesos de acreditación nacionales e internacionales evalúan las actividades de assessment de las casas de estudio, pues son conscientes del impacto positivo en el logro de los objetivos académicos y minimiza la deserción. El acompañamiento y guía significan un aporte relevante en los modelos de formación modernos con foco en resultados tangibles. La formulación de planes de acción y desarrollo, así como el análisis de datos son una evidencia clara de un mecanismo bien implementado.
