El campo de la ingeniería demanda la formación de profesionales que superen los nuevos desafíos de las industrias. Esta carrera, en cualquiera de sus especializaciones, exige la preparación de profesionales altamente competitivos y que cuenten con habilidades para solucionar problemas en procesos, infraestructura, informática, tecnología, etc.
Es por esa razón que la comprensión de necesidades, retos y exigencias de la profesión es de vital importancia para impartir programas académicos que formen a los expertos en cada rubro. Pero, ¿cómo podemos asegurar que una carrera esté alineada a este tipo de exigencias? Las acreditaciones son cruciales en esta respuesta.
Existen acreditaciones especializadas en el campo de la ingeniería con modelos distintivos que apuntan a alcanzar objetivos vinculados a la innovación, soluciones tecnológicas y eficientes, optimización de procesos y liderazgo en proyectos. Por ejemplo, a nivel nacional, el Instituto de Calidad y Acreditación de Programas de Computación, Ingeniería y Tecnología (Icacit), agencia especializada en programas de formación profesional en computación, ingeniería y tecnología en ingeniería, reconoce los altos estándares de productos educativos bajo determinados criterios de postulación.
La credencial Icacit tiene un modelo semejante al planteado por ABET (Accreditation Board for Engineering and Technology), agencia de prestigio mundial y especializada en programas académicos de ciencias, tecnología e ingeniería. Adicionalmente, Icacit es miembro del Washington Accord, un acuerdo entre las más prestigiosas acreditadoras en el campo en mención.
El impacto social de la profesión hace necesaria la búsqueda de la mejora continua, de la mano con el cumplimiento de estándares que guarden congruencia con las necesidades y exigencias de diversos sectores económicos.
La participación voluntaria de las casas de estudio fomenta la competitividad de los profesionales de la ingeniería, dando paso al desarrollo, aportando al crecimiento del país a través del conocimiento especializado. Los resultados, emitidos por profesionales con experiencia comprobada en el rubro, no solo impactan en el mejoramiento de un programa académico, también, permite que respondan a las problemáticas actuales y a los avances de la industria.